Ana es de profesión, modelo. Para ella, la belleza la define como persona y todos los demás atributos que pueda poseer le son del todo irrelevantes.
Cada noche sueña con que un grabe accidente le ha deformado su precioso rostro y cada noche cuando se despierta de su peor pesadilla corre a mirarse en el espejo. Cuando comprueba que aun sigue siendo bella vuelve a su cama, junto a su novio Angel y se duerme como un bebé.
Ahora Ana no está soñando, está en una sesión fotográfica dirigida por un prestigioso fotógrafo que busca a la nueva chica portada de Womman`s. Para ella, hoy, es el dia mas importante de su vida, todo se decide en cinco disparos , de esos cinco disparos saldrá una foto y esa foto tiene que ser la que le dé el pasaporte para la fama y el dinero, sino es así, si su foto queda entre las demás perdedoras, Ana se suicidará, así lo decidió en su día. Así que hoy Ana se muestra con su mejor sonrisa, su mejor escote y su mejor pose de mujer inaccesible para la mayoría de mortales.
Al acabar la sesión, Roberto, el fotógrafo, la invita a pasar a su despacho y sin previo aviso le ordena que se desnude y que se ponga a cuatro patas con el culo mirando hacia él. Ana ni se inmuta, ya esta acostumbrada, es consciente de su enorme belleza exterior y el poder que eso influye sobre cualquier miembro masculino y por supuesto no piensa decirle que no a un fotógrafo que puede catapultarla directamente hacia el éxito.
El miembro de Roberto es enorme y a ella le duele a horrores cada vez que este penetra por su estrecha vagina pero ella no muestra ningún signo exterior de dolor, al contrario, gimotea como una gata en celo.
Al acabar, Ana se limpia , con un cleanex, todos los restos de semen que el miembro de Roberto le había dejado en su lustrosa cara.
Al salir del estudio, Roberto ni siquiera se despide de ella, cosa que le da igual, lo que no le da igual es ese dolor punzante que siente en la entre pierna cada vez que da dos pasos.
Mientras camina por la calle de regreso a casa, Ana piensa en todos los miembros que se ha tenido que tragar su estrecha vagina , todo miembros pequeños, todo favores pequeños, por lo tanto si hoy su vagina se había tragado un buen miembro es que la recompensa sería enorme. . Por esa regla de tres que había calculado en cuestión de segundos estaba segura de que su foto sería la elegida para la portada de Womman’s. Esa era la manera de pensar de Ana.
Ana continua caminando y continua soñando pero todo cambia en el instante que pasa por delante de un gran edificio, sucio y viejo. Lo que la hace detenerse no es el aspecto del edificio, sino el olor que proviene de el, un olor tan intenso que los sueños de ser una modelo profesional rica y famosa desaparecen. Ahora ya no quiere ser modelo, ahora lo único que desea es saber de donde proviene ese olor que la hace sentir como si estuviera en el mismísimo paraíso.
Ana sube por las escaleras, ahora sin dolor, ya que en su cabecita de niña mona solo había lugar para aquel olor que rastreaba con impaciencia.
Al llegar al segundo piso se detiene en seco, cierra los ojos y aspira profundamente. Con los ojos cerrados y los orificios de la nariz abiertos al máximo continúa caminando, siguiendo el rastro de aquel olor. Se detiene. Abre los ojos. Una lagrima de excitación cae de su ojo derecho. Enfrente tiene una puerta. Intenta abrirla pero como es lógico está cerrada. Toca el timbre pero nadie le abre y en cuestión de segundos lo tiene decidido, tiene que saber la fuente de aquel olor, así que Ana con una muestra de fuerza de la que nunca antes había echo gala tira la puerta de una patada. El olor inunda su ser y ella vuela entre nubes de algodón de azúcar. Sin pararse a mirar si alguien la había visto tirar la puerta abajo entra en el piso.
Pasen y vean, señores y señoras, pasen y vean un niño con el cráneo reventado en un rincón del enorme salón.
Pasen y vean señores y señoras, pasen y vean a Ana la modelo acercarse hacía el niño muerto.
Pasen y vean señores y señoras, pasen y vean a Ana metiéndose los sesos desparramados del niño en la boca.
Pasen y vean señores y señoras, pasen y vean a Ana con lagrimas de placer orgásmico en los ojos mientras saborea tan exquisito manjar.
............(continuará)

By David Meyhem

Mañana otro capitulo de Sociedad Psicópata